De ruta turística

Como el aburrimiento es muy grande estos días en casa (quitando las horas que me paso planchando y cosas así), me dije "¿y porqué no nos vamos de ruta turística por ahí y así conocemos mundo?".
Verdaderamente habíamos quedado mis amigas y yo para buscar algún restaurante e ir de cena el jueves... pero así quedaba mucho mejor.

Así que ayer de tarde vinieron a buscarme y, después de unos cuantos cotilleos en la cocina con mi madre, allá nos fuimos.

La siguiente parada era Caldas de Reis. Allí Patri y yo teníamos que esperar por la tercera en discordia, María, que nos acompañaría a buscar dónde hacer una cena decente.
Como llegamos un poco antes de tiempo (unos 45 minutos) nos fuimos a dar un paseo por el parque de Caldas.
Sabíamos que a la salida del parque había una cafetería, así que llamamos a un amigo nuestro para que invitase a algo (de gorronas íbamos :P). Por suerte, nuestro amigo estaba allí al lado, así que casi al instante nos apareció por el medio de la maleza del parque y se vino con nosotras. Conste que no le hicimos pagar :P

Después de charlar un buen rato, María llegó, así que cogimos nuestros bártulos y nos metimos en su coche dirección Villagarcía. Nos habían hablado de un restaurante en Rubiáns, pero cuando llegamos cual fue nuestra sorpresa al encontrarnos con una puerta cerrada, supongo que por descanso del personal.

"Creo que hemos elegido un mal día para buscar donde cenar, los lunes suele cerrarse todo", dijo una.
"Buscamos algo por aquí cerca?", preguntó otra.
"¿Y si nos vamos a Santiago?", respondió la que faltaba.

Como dice el refrán "el que calla, otorga", y nosotras le otorgamos a María la decisión final de irnos a Santiago, al fin y al cabo ella llevaba el coche. Así que, con la radio puesta, las ventanillas subidas (que alguna tenía frío...) y hablando de todo un poco, cogimos dirección Santiago por la costa. Negaré haberlo escrito yo, pero la ría de Arousa es preciosa...

Cuando estábamos llegando a Pontecesures, recordé que tenía allí un conocido, pero no tenía su teléfono, así que no lo pude molestar (que lástima xD).
De pronto, bip bip, un sms en mi móvil. ¿Quién se acuerda de mi a estas horas? Abro el móvil y leo "poned radio local [por poner un nombre de radio] que está sonando una canción muy chula", se lo dije a María y cambió ella la radio. Verdaderamente la canción era chula: Love Generation.

En esto que íbamos hablando de... de lo que solemos hablar normalmente [para qué dar explicaciones cuando no es necesario] cuando se me iluminó la bombilla y mandé un sms a la radio local para que le dedicase una canción a Sonia, que la pobre estaba trabajando y no podía venir con nosotras.
Pero la tontiña de la presentadora, como debía tener mejores cosas que hacer, nos empaquetó a nuestra dedicatoria una canción de amor que antes había sido dedicada por una pareja de novios que, literalmente, "se querían muchísimo". [ironía]Debe ser que no se dio cuenta de que en la dedicatoria incluíamos la canción que queríamos que pusiese...[/ironía]

De allí a un rato se escucha "pues la siguiente canción va para Cris, Patty y María, que andan de carallada por ahí". La canción era la idónea para el viaje. Bajamos las ventanillas y subimos el volumen, L'impazienza sonaba bien y, aunque hacía bastante calor, me mandaron subir las ventanillas, no fuera a ser que pillasemos una pulmonía :P

Y yo allí, muerta de calor (¿estaré menopausica yo?) subí por enésima vez mi ventanilla y abri la entrada de aire del "aire acondicionado" que echaba el 206. Quise contestar otra vez nuestra dedicatoria pero... me quedé sin batería en el móvil. Incomunicada total.

Llegamos a Santiago sin pena ni gloria, claro que después de haber pasado por la ría de Arousa, el río Ulla en Padrón y todo verde y bonito, cuando llegas a la ciudad te aburres un poco de ver edificios y más edificios. Pero bueno, esas cosas pasan. Mis calores menopaúsicos seguían matándome así que cada vez que parábamos en un semáforo (que no fueron pocos) bajaba un poco la ventana y respiraba "aire de verdad".

La conductora hablaba sola: "ahora la salida de Ourense... esta rotonda no, en la siguiente es la salida por la carretera..." [se refería a la nacional, como si la autopista no tuviese carretera :P] Ayyy si te viese uno que yo me sé, mucho te vacilaría... jajaja.

Pero la verdad es que es para perderse.

El restaurante en cuestión estaba a la salida de Santiago, dirección Ourense, sí... lo que nadie dijera hasta el momento era que tendríamos que cruzar unos caminos de cabras para llegar a él. Después hablan de donde vivimos nosotras... (sin comentarios)
Llegamos, reservamos y nos fuimos.

Qué fáciles se ponen las cosas cuando se anda sin prisas. Seguro que si fuésemos con el tiempo justito, nos harían esperar horas hasta que el camarero llamase al jefe y nos pusiera un precio asequible. Pero por una vez en la vida, nos salió bien el tiro.

La vuelta resultó menos amena, ir por la autopista es más aburrido que ver el mar constantemente, pero como no podría ser de otra manera, mientras íbamos avisando al resto de personal sobre la fecha y hora, al mismo tiempo nos íbamos vacilando las unas a las otras sobre quién llamaría a quién y como nos repartiríamos los coches para ir.
Hasta aquel momento tenía muy claro cómo iba a ser el reparto... a estas alturas ya nada es seguro. Ni siquiera sé si llevaré yo el coche.

No quiero pensar que todo saldrá como esperamos y que tendremos mucho que contar el viernes, siempre que digo lo mismo se gafan las cosas.
Sin embargo, espero resolver enigmas de un par de personas que van entre nosotros, enigmas que hasta el momento frustran más que fastidian y que ya es necesario que se solucionen sino mi cabeza [y alguna que otra más] explotará.

Seguramente el viernes tenga algo que contar después de comer.. digooo cenar [y me hago la sueca :P] Mientras tanto, nos veremos mañana de fiesta en fiesta.

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Pregunta del día: ¿habrá algo que contar?
Frase del día: Hay que tener aspiraciones elevadas, expectativas moderadas y necesidades pequeñas - H. Von Stein
Canción del día: Baba O'Riley - The Who